Debemos de tomar en cuenta que todo arquitecto sabe que la planta, a pesar de no ser suficiente, es un elemento que tiene una acentuada preeminencia para la determinación del valor artístico. El caracter de cada obra arquitectónica está determinado, tanto en el espacio interno como en el juego de volúmenes, todo producto de arquitectura está calificado por su escala.
Es importante saber que el descubrimiento de la cinematografía es de inmenso alcance para la representación de los espacios arquitectónicos; si se recorre un edificio con un aparato cinematográfico y despueés se proyecta en el film se podrá revivir el camino realizado y una gran parte de la experiencia espacial que proviene de él.
Los medios para representar el espacio : plantas, fachadas, maquetas y fotografíass, cinematógrafo, después de entendidos su sentido arquitectónico puede ser investigado, profundizado, y mejorado.
Debemos saber que NINGUNA REPRESENTACIÓN ES SUFICIENTE tenemos que ir nosotros, tenemos que estar incluidos y tenemos que llegar y a sentrinos parte y metro del organismo arquitectónico. Todo lo demás es útil, necesario y fecundo pero no es más que una mera ilusión y función preparatoria de auqella hora en la que todo lo físico, todo lo espiritual y todo lo humano que hay en nosotros, hos haga vivir los espacios como una adhesión integral y orgánica.
domingo, 21 de marzo de 2010
El espacio, protagonista de la arquitectura
Debemos saber que la ausencia de una historia aceptable de la arquitectura proviene de la falta de habituación en la mayoría de los hombres para comprender el espacio, y del fracaso de los historiadores y de los críticos de la arquietectura en aplicar y difundir un método para el estudio espacial de los edificios.
El carácter reside en actuar por medio de un vocabulario tridimensional que involucra al hombre; debemos saber que la arquitectura es como una gran escultura excavada, en cuyo interior el hombre penetra y camina.
Es importante saber que quien se quiera iniciar en el estudio de la arquitectura tiene que comprender cómo una planta puede ser abstractamente bella en el papel, cómo cuatro frentes pueden parecer bien estudiados por el equilibrio de sus llenos y vacíos, de sus salientes y entrantes, cómo el volumen en conjunto puede ser igualmente proporcionado, y a pesar de eso, el edificio puede resultar arquitectónicamente pobre.
Para empezar a comprender los edificios, se debe tomar poseción del espacio y saberlo ver. Ademas debemos mencionar que las 4 fachadas de una casa, edificio, palacio, etc. no constituyen más que la caja en la que está comprendida la joya arquitectónica. Lo contenido es el espacio interior.
También es muy importante tener claro que toda obra arquitectónica para ser comprendida y vivida, requiere el tiempo de nuestro recorrido, la cuarta dimensión.
Todo mundo habla y define la arquitectura debido a sus experiencias, pero la definición más precisa es: aquella que tiene en cuenta el espacio interior. La arquitectura bella será la arquitectura que tiene un espacio interno que nos atrae, nos eleva, nos subyuga espiritualmente: la arquitectura fea será aquella que tiene un espacio interno que nos molesta y nos repele. Lo importante es que todo lo que no tiene espacio interno no es arquitectura. Decir que el esapcio interno es la esencia de la arquietctura, no significa que el valor de una obra arquitectónica se agote en el valor espacial. Todo edificio se caracteriza por una pluralidad de valores.
La historia de la arquitectura es la historia de las concepciones espaciales. Cuando el juicio sobre la concepción espacial de un edificio, sobre su volumetría y sobre sus aditamentos decorativos es positivo, entonces nos encontramos frente a las grandes e íntegras obras de arte, en cuya excelsa realidad colaboran los medios expresivos de todas las artes figurativas.
La arquietctura se puede encontrar las contribuciones de las demás artes, es el espacio interno, es espacio que nos circunda, y nos incluye, el que da el juicio sobre un edificio, el que constituye el sí y el no de cualquier sentencia estética sobre arquitectura.
El carácter reside en actuar por medio de un vocabulario tridimensional que involucra al hombre; debemos saber que la arquitectura es como una gran escultura excavada, en cuyo interior el hombre penetra y camina.
Es importante saber que quien se quiera iniciar en el estudio de la arquitectura tiene que comprender cómo una planta puede ser abstractamente bella en el papel, cómo cuatro frentes pueden parecer bien estudiados por el equilibrio de sus llenos y vacíos, de sus salientes y entrantes, cómo el volumen en conjunto puede ser igualmente proporcionado, y a pesar de eso, el edificio puede resultar arquitectónicamente pobre.
Para empezar a comprender los edificios, se debe tomar poseción del espacio y saberlo ver. Ademas debemos mencionar que las 4 fachadas de una casa, edificio, palacio, etc. no constituyen más que la caja en la que está comprendida la joya arquitectónica. Lo contenido es el espacio interior.
También es muy importante tener claro que toda obra arquitectónica para ser comprendida y vivida, requiere el tiempo de nuestro recorrido, la cuarta dimensión.
Todo mundo habla y define la arquitectura debido a sus experiencias, pero la definición más precisa es: aquella que tiene en cuenta el espacio interior. La arquitectura bella será la arquitectura que tiene un espacio interno que nos atrae, nos eleva, nos subyuga espiritualmente: la arquitectura fea será aquella que tiene un espacio interno que nos molesta y nos repele. Lo importante es que todo lo que no tiene espacio interno no es arquitectura. Decir que el esapcio interno es la esencia de la arquietctura, no significa que el valor de una obra arquitectónica se agote en el valor espacial. Todo edificio se caracteriza por una pluralidad de valores.
La historia de la arquitectura es la historia de las concepciones espaciales. Cuando el juicio sobre la concepción espacial de un edificio, sobre su volumetría y sobre sus aditamentos decorativos es positivo, entonces nos encontramos frente a las grandes e íntegras obras de arte, en cuya excelsa realidad colaboran los medios expresivos de todas las artes figurativas.
La arquietctura se puede encontrar las contribuciones de las demás artes, es el espacio interno, es espacio que nos circunda, y nos incluye, el que da el juicio sobre un edificio, el que constituye el sí y el no de cualquier sentencia estética sobre arquitectura.
La ignorancia de la arquitectura
Debemos de empezar a darnos al estudiar diesño o aruqietcto que nadie puede cerrar los ojos frente a todas las edificaciones que integran la escena de la vida ciudadana.
Los arquitectos profesionales deben de tener una pasión por la arquitectura en el sentido vivo de la palabra.
La aquitectura moderna se inserta en la cultura arquitectónica, y se propone en primer término una revisión crítica de esta misma cultura.
Creo que los seres humanos, en especial los arquitectos debemos de enseñar a saber ver la arquitectura, debemos proponernos ante todo una claridad de método. El lector medio que hojea los libros de estética y de crítica arquitectónica queda horrorizado por la vaguedad de los términos: verdad, movimiento, fuerza, vitalidad, sentido de los límites, armonía, gracia, escala, proporción, luz y sombra, etc. Estos son atributos de la arquitectura que los autores catalogan sin precisar a que cósa se refieren. Todos tienen un lugar legítimo en la historia de la arquitectura, pero con una condición: que esté aclarada la esencia de la arquitectura
Los arquitectos profesionales deben de tener una pasión por la arquitectura en el sentido vivo de la palabra.
La aquitectura moderna se inserta en la cultura arquitectónica, y se propone en primer término una revisión crítica de esta misma cultura.
Creo que los seres humanos, en especial los arquitectos debemos de enseñar a saber ver la arquitectura, debemos proponernos ante todo una claridad de método. El lector medio que hojea los libros de estética y de crítica arquitectónica queda horrorizado por la vaguedad de los términos: verdad, movimiento, fuerza, vitalidad, sentido de los límites, armonía, gracia, escala, proporción, luz y sombra, etc. Estos son atributos de la arquitectura que los autores catalogan sin precisar a que cósa se refieren. Todos tienen un lugar legítimo en la historia de la arquitectura, pero con una condición: que esté aclarada la esencia de la arquitectura